La historia de Jory comienza en 1963, cuando la familia Jory trabajaba como corredora de frutos del país, destacando en el comercio del trigo y la linaza proveniente del norte de Chile. Ese año, una venta fallida de 500 toneladas de semillas de linaza marcó un punto de inflexión: en lugar de desistir, decidimos transformar el desafío en una oportunidad.
Con esfuerzo y visión, instalamos nuestra primera planta en Ovalle y comenzamos a producir nuestro propio aceite de linaza. Poco después, trasladamos la operación a nuestra actual ubicación en la Panamericana Norte, consolidando una tradición basada en el trabajo, la calidad y la innovación.
Hoy, más de seis décadas después, Jory es el único fabricante chileno de aceite de linaza genuino, abasteciendo a las principales industrias de retail, pinturas y resinas. Nuestra experiencia nos impulsa a seguir desarrollando productos en diferentes disciplinas y areas, siempre ecológicos y sustentables, profesionales y respetuosos con el medio ambiente, manteniendo vivo el espíritu que nos vio nacer.
